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SUGERENCIAS DE CRITERIOS
PARA EXAMINAR LOS 100 DIAS DEL GOBIERNO DE MAURICIO FUNES
1. El Gobierno de Mauricio Funes, respaldado con intensa participación del FMLN, como partido, es un gobierno de izquierda. Es, con todo y problemas, soluciones, deficiencias y cualidades, lo más avanzado que puede dar la sociedad salvadoreña en este momento histórico en términos de defensa de los intereses de mayorías sociales excluídas, como se conceptualizó al sector mayoritario de la población durante la campaña.
2. La premisa anterior es importante, especialmente para las fuerzas de izquierda, para ubicar los apoyos y las críticas a la gestión del Gobierno de Mauricio Funes y los funcionarios del FMLN.
El Gobierno de Funes no puede, por razones de situación y correlación histórica de fuerzas económicas y políticas producir cambios gubernamentales de contenido socialista, ni esta situación es realista ni ha sido propuesta.
Las críticas de izquierda, aún cuando sean certeras y reales, no deben confundir el problema principal de coyuntura, el cambio del modelo económico, con el problema principal de la estructura, el cambio del sistema económico. No se puede confundir la solución de problemas de corto plazo, con los de largo plazo en términos históricos.
El problema principal de la histórica exclusión social no radica en las soluciones que en el cortísimo plazo de 100 días pueda dar el Gobierno de Funes y los funcionarios del FMLN, a problemas que tienen décadas sino siglos de existencia y que forman parte de un funcionamiento orgánico de la denominada marginación social.
En términos económicos el problema principal lo constituye en el actual momento histórico, el agravamiento de las condiciones económicas y sociales producto de la aplicación del modelo neoliberal, que redujo la participación del Estado a niveles casi insignificantes en la solución de los problemas sociales.
Y en el fondo el modelo neoliberal ha sido y es impulsado, pese a su fracaso, por los sectores oligopólicos nacionales e internacionales y sus expresiones políticas y financieras.
3. Estos razonamientos nos llevan a una conclusión que parece un lugar común pero no lo es. Con el Gobierno de Funes la izquierda, en todos sus matices, debe desarrollar una crítica propositiva, constructiva, lo que quiere decir, que partiendo de los intereses humanamente justos de la mayoría de la población y las posibilidades reales de avanzar en su consecución, se desarrolle como método básico la PERSUACION, la DEMOSTRACION de las causas y efectos de los problemas y la PROPOSICION REALISTA de formas de solución.
4. El uso de la PRESION social debe dirigirse contra las causas de los problemas económicos y sociales, contra los intereses oligopólicos neoliberales que son el obstáculo principal, para un ejercicio más amplio y profundo del papel del Estado en la administración pública relacionada con programas sociales. Las posiciones oligopólicas neoliberales dificultan que los funcionarios del Gobierno de Funes y los funcionarios del FMLN desarrollen su capacidad de interlocución y gestión de cambio hacia el progreso económico y social democrático.
5. De manera que es determinante caracterizar el momento histórico, su secuencia, el período histórico por el cual se atraviesa para a su vez, examinar las funciones manifiestas y latentes del movimiento social en el período.
El pueblo, clasificado conforme intereses económicos y sociales, esta constituido por todos los sectores no oligopólicos, trabajadores y empresarios, que en el proceso electoral reciente el FMLN como partido político ha representado y conducido hacia el logro de un gobierno que posiblita una mayor democracia económica y social en el corto y mediano plazo y, conforme al programa máximos del FMLN, se abre inicialmente la perspectiva de construcción del socialismo en el largo plazo, dicho sea esto en términos históricos.
6. Al respecto es crucial comprender que en el momento histórico actual no se trata de cambio del SISTEMA capitalista por un SISTEMA socialista.
Una consideración al respecto podría ser que ni el sistema capitalista ha madurado suficientemente para ser erradicado plenamente ni el sistema socialista ha madurado suficientemente para ser instaurado plenamente.
El tratamiento de esta temática, de la construcción del socialismo deñ siglo XXI, con las diferencias geográficas e históricas del caso, a nivel mundial como nacional, es crecientemente, objeto de otra discusión profunda y abierta en términos de ciencia social.
7. Todo sistema económico y social tiene modos de funcionamiento, que nosotros llamamos “modelos” de funcionamiento (diferenciamos sistema y modelo económico, por primera vez, en un análisis del contexto de los Acuerdos de Esquipulas II en 1987, firmado por los Presidentes centroamericanos de ésa época).
Teórica y prácticamente, el modelo es una concreción del funcionamiento del sistema, pero no es el sistema; el modelo es auténtico, tiene independencia como hecho social; durante un período histórico el modelo posibilita el desarrollo del sistema, pero en otro período lo retrasa; el cambio del modelo es necesario para el desarrollo del sistema, pero también puede abrir el camino histórico de su sustitución; el modelo es un hecho de física social, nace, crece, se reproduce y muere o se agota en la provisión y canalización de energías económicas y sociales para el desarrollo del sistema.
8. El modelo neoliberal tiene tres componentes de política económica en que concreta la defensa histórica de los intereses oligopólicos del capitalismo nacional e internacional:
8.1. La liberación de precios. No control de los precios para empresas oligopólicas.
8.2. La privatización oligopólica. Traspaso de recursos y propiedades del Estado a la empresa privada y no control del accionar de la empresa privada, especialmente la oligopólica.
8.3. Reducción del papel del Estado. Recorte de subsidios y programas sociales.
La crisis económica mundial es producto del funcionamiento del sistema capitalista, y no del funcionamiento del modelo neoliberal.
La implementación del modelo neoliberal no ha creado pero ha agravado, la crisis capitalista.
En el contexto se han puesto de relieve las limitaciones y la caducidad del modelo neoliberal como modo de funcionamiento del capitalismo y en el mundo y especialmente en los Estados Unidos de América se ha recurrido una vez más (la primera vez fue en el contexto de la crisis capitalista mundial de 1930) a los fondos del Estado, que son los fondos de los contribuyentes, de la población, para “salvar” de la quiebra a empresas financieras, especialmente.
Las empresas financieras, podría decirse, que literalmente enloquecieron con el libertinaje del modelo neoliberal, haciendo una especulación financiera sin precedentes en la historia de la humanidad.
La exacción de recursos del Estado, la privatización insana, la extensión del desempleo, la inflación real, el incremento arbitrario de precios por parte de empresas oligopólicas, la impotencia en la protección de los derechos de los consumidores, el fraude mercantil, la exponencialmente creciente corrupción pública y privada, el incremento de la delincuencia de cuello blanco y del enriquecimiento criminal y la pobreza han acentuado la necesidad del resurgimiento de la importancia del papel del Estado y de una sana administración pública (eficiente, transparente y honradamente consecuente) dada la potencialidad de los conflictos sociales desatados como resultante de la crisis económica agravada con el neoliberalismo.
Nuestro país no es una excepción. Se ha mantenido y profundizado un modelo neoliberal durante más de dos décadas durante la administración del partido ARENA, pero que todavía subsiste a pesar de su fracaso y el descontento social ocasionado por el denominado "capitalismo salvaje" impulsado por el neoliberalismo, se manifestó en la votación que culminó con la elección de Mauricio Funes adscrito a la trayectoria histórica del FMLN.
9. De manera que el cambio del modelo es una necesidad histórica presente.
Al respecto pueden plantearse dos escenarios, en la actual coyuntura histórica y de acuerdo a la correlación de fuerzas existente:
9.1. Se realizan cambios débiles y orientados al mantenimiento del modelo neoliberal pero reacondicionado o reformado, impulsando algunos programas sociales por parte del Estado. Esto implica el mantenimiento del modelo neoliberal y el sistema capitalista en el largo plazo.
9.2. Se realizan cambios graduales pero firmes y orientados al cambio del modelo neoliberal por un modelo de economía con una mayor participación del Estado.
Esto implica la posibilidad del inicio del cambio del modelo neoliberal en dos vertientes en el largo plazo: el mantenimiento del sitema capitalista a mayores niveles de expansión o el inicio de la sustitución del sistema capitalista por un sistema socialista.
Partimos de la premisa de que el cambio económico y social hacia una mayor participación del Estado, superficial o profunda, es una necesidad histórica. No puede no hacerse cambios.
En la secuencia de los escenarios hay un punto común: el gobierno de Mauricio Funes ha iniciado cambios, que podrían reputarse como históricamente tenues, pero que tienen un gran significado en el momento histórico, de cambios necesarios.
Esos cambios iniciales, que han capturado la aprobación inicial de la población, tienen, probablemente, la perspectiva siguiente en otros dos escenarios:
9.1. El gobierno de Mauricio Funes no logra que los cambios trasciendan el modelo neoliberal y la correlación de fuerzas económica y social, nacional e internacional, conducen los cambios para reacondicionar y modernizar el modelo neoliberal.
En este escenario las contradicciones y fricciones de los intereses de la población con los intereses oligopólicos, nacionales e internacionales se agravarían, habría confrontación e inestabilidad social, de dimensiones nacionales, nos parece. La situación económica y social de la mayoría de la población tenderá a agravarse, y a complicarse la conducción del movimiento social porque la población reaccionaría con lucha social, que se convertiría en lucha política con diversas expresiones de violencia social, como respuesta a la profundización de las debilidades del modelo neoliberal, conforme a un listado de debilidades que enunciamos anteriormente, en el numeral 8.
Al aumentar la conflictividad surgirían nuevos liderazgos y organizaciones y se ocasionarían distanciamientos entre el FMLN y el gobierno.
Y la misma derecha insistiría en la incapacidad del gobierno para resolver los problemas que se comprometió a solucionar e intentaría generar divisiones entre el gobierno y el FMLN, en la dirección de habilitar la posibilidad de retomar directamente el poder gubernamental en el próximo período electoral, si no antes.
En este escenario el agravamiento de la conflictividad social sería mayor pues el FMLN tendría que retomar su capacidad de conducción social después de un intento cuestionado de cambio desde un gobierno adscrito a su trayectoria y el espacio político social, con sus flujos y reflujos, podría ser llenado por otro tipo de organizaciones, sin la trayectoria histórica, ideologica, teórica y organizativa del FMLN. En este escenario de continuidad del neoliberalismo, nos parece que se debilitaría un instrumento central, el FMLN, de participación política del pueblo salvadoreño. Es un escenario difícil para toda la sociedad, pues los espacios políticos podrína ser llenados por todo tipo de organizaciones, incluyendo la potencialización de la influencia del crimen organizado y se abriría con ello, la posibilidad de instauración de una dictadura militar.
En la secuencia del escenario 9.2. El gobierno de Mauricio Funes ya ha iniciado cambios que son sensibles en la medida en que nuestra población ha sido históricamente excluída de la provisión de derechos, condiciones, bienes y conportamientos de respeto elementales en el manejo de los fondos públicos, como son la fiscalización efectiva de la administración pública, la educación, la salud, la vivienda.
Los programas de auditorías externas en los Ministerios, la dotación de paquetes escolares, la eliminación de las cuotas voluntarias en el sistema de salud, la escrituración de propiedades, el lanzamiento del programa de vivienda, el enunciado de la administración de Funes de que se hará un manejo de los fondos públicos con austeridad y eficiencia tiene un impacto visible, inmediato.
En la secuencia de estos primeros cambios significativos, el gobierno de Mauricio Funes probablemente impulsará cambios graduales cuidadosamente calculados conforme a la construcción de correlaciones de fuerzas económicas y sociales que lo llevarán a cuestionar las bases NO DEL SISTEMA CAPITALISTA, SINO DEL MODELO NEOLIBERAL
Un punto inicial de este cuestionamiento de las bases del modelo neoliberal probablemente sean las adecuaciones al sistema financiero y al pacto fiscal para evitar la evasión y la conformación y planteamientos del Consejo de Desarrollo Económico y Social.
El cuestionamiento y el inicio del proceso de sustitución del modelo neoliberal son una necesidad histórica y social.
10. La continuidad y profundización del cuestionamiento del modelo neoliberal depende de la movilización social que previsiblemente se realizará de manera espontánea o inducida.
La sociedad civil y la sociedad política evaluaran estrategias y tácticas del gobierno de Mauricio Funes y del FMLN y cada fuerza formulará los lineamientos para el próximo período electoral.
11. En el enjambre de contradicciones, evolucionando a paso lento, se puede percibir que este período corresponde al tránsito del modelo neoliberal al modelo de economía estatal de mercado, generando posibilidades de largo plazo, que se dirimirán en el proceso, tanto para el mantenimiento del sistema como para el cambio del sistema.
Inevitablemente se intensificará la organización social de las fuerzas políticas y sociales de la población.
De manera que estamos en un período de cambio del modelo neoliberal al modelo de economía estatal de mercado.
Como una fuerza de física social, gradualmente pero persistentemente es previsible que la población reivindique sus derechos del trabajo: mejoras en el salario mínimo social, reducción de precios oligopólicos e impuestos a bienes básicos, exija la defensa estatal contra abusos de empresas oligopólicas, programas sociales de educación, salud, vivienda y fiscalice la capacidad, la eficiencia, la transparencia, en el manejo de los fondos públicos en la dirección necesaria de impulso gradual de una sociedad organizada en el respeto económico y social al trabajo desplegado.
En otras palabras es previsible una situación de fricciones sociales en que la población se manifieste políticamete y económicamente, por el control de precios oligopólicos, la regulación de empresas privadas oligopólicas y la adecuación eficiente y sin corrupción, de las empresas y funciones estatales estratégicas (electricidad, telefonía, pensiones, banca del Estado, por ejemplo) por tratarse de bienes y servicios públicos de vital necesidad.
Y también es previsible que la población canalice la presión política hacia los hechos sociales, no hacia el gobierno, en la perspectiva de que el gobierno también procurará impulsar la concreción de los legítimos intereses de los sectores sociales excluídos. En este escenario el gobierno de Mauricio Funes y el FMLN, como partido político, se fortalecen; es a nuestro juicio, el escenario más favorable para la izquierda y para toda la sociedad porque, tanto el Gobierno como el Partido, fortalecen su apoyo social, su capacidad de administración y de gestión política de la crisis y el país crece económicamente, desplazando contradicciones sociales.
12. El problema del cambio del modelo neoliberal al modelo de economía estatal de mercado, es en gran medida un problema de conciencia y de capacidad de administrar y gestionar el cambio.
Al respecto, nos parece prudente hacer las siguientes consideraciones:
12.1. Considerar que una parte central del problema del cambio social es un problema de conocimiento, conciencia social, idoneidad y capacidad para administrar y gestionar el cambio.
12.2. Considerar al gobierno de Mauricio Funes como lo que es, un aliado del FMLN en el cambio del modelo neoliberal. No solamente expresó formalmente su voluntad de cambio del modelo durante la campaña electoral, suscrito en el documento del Programa de Gobierno, que aunque presente aspectos de desarticulación lógica y falta de priorización enuncia medidas sustanciales que están relacionadas con el cambio del modelo neoliberal, en los términos que expusimos en el numeral 8.
12.3. Considerar que el gobierno de Mauricio Funes inicia procesos de cambio en el manejo del presupuesto nacional que favorecen los objetivos de la población, y que la situación presupuetaria del gobierno ha sido grave, por el deterioro de las arcas del Estado en anteriores períodos.
Considerar el apoyo positivo de las medidas relacionadas con la dotación de paquetes escolares, reducción de cuotas en los hospitales, programa de vivienda, adjudicación de tierras, probable promoción de la banca del Estado.
12.4. Considerar que si no se avanza en el cuestionamiento del modelo neoliberal, los problemas engendrados por éste aparecerán potencializados: predominio de precios altos oligopólicos que consumirán los recursos derivados de las políticas de redistribución del ingreso del gobierno; impunidad de acción lesiva de los intereses nacionales por parte de empresas oligopólicas, cobros arbitrarios y evasión de responsabilidades impositivas; limitación de los recursos y perspectivas de empresarialidad democrática y de apoyo al desarrollo emprendedor alternativo por parte del Estado, y forzamiento a un creciente endeudamiento dependiente y supeditado que resultará en mayores cargas impositivas para la población.
Considerar que en la perspectiva del cambio del modelo neoliberal la demanda de la población aumentará y dinamizará la economía y la empresa y a la par del desarrollo de potencialidades de organización y movilidad social, la población desarrollará capacidades alternativas de emprendimiento, de generación de bienes materiales, de trabajo productivo, con función social.
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SUGERENCIAS DE CRITERIOS
PARA EXAMINAR LOS 100 DIAS DEL GOBIERNO DE MAURICIO FUNES
1. El Gobierno de Mauricio Funes, respaldado con intensa participación del FMLN, como partido, es un gobierno de izquierda. Es, con todo y problemas, soluciones, deficiencias y cualidades, lo más avanzado que puede dar la sociedad salvadoreña en este momento histórico en términos de defensa de los intereses de mayorías sociales excluídas, como se conceptualizó al sector mayoritario de la población durante la campaña.
2. La premisa anterior es importante, especialmente para las fuerzas de izquierda, para ubicar los apoyos y las críticas a la gestión del Gobierno de Mauricio Funes y los funcionarios del FMLN.
El Gobierno de Funes no puede, por razones de situación y correlación histórica de fuerzas económicas y políticas producir cambios gubernamentales de contenido socialista, ni esta situación es realista ni ha sido propuesta.
Las críticas de izquierda, aún cuando sean certeras y reales, no deben confundir el problema principal de coyuntura, el cambio del modelo económico, con el problema principal de la estructura, el cambio del sistema económico. No se puede confundir la solución de problemas de corto plazo, con los de largo plazo en términos históricos.
El problema principal de la histórica exclusión social no radica en las soluciones que en el cortísimo plazo de 100 días pueda dar el Gobierno de Funes y los funcionarios del FMLN, a problemas que tienen décadas sino siglos de existencia y que forman parte de un funcionamiento orgánico de la denominada marginación social.
En términos económicos el problema principal lo constituye en el actual momento histórico, el agravamiento de las condiciones económicas y sociales producto de la aplicación del modelo neoliberal, que redujo la participación del Estado a niveles casi insignificantes en la solución de los problemas sociales.
Y en el fondo el modelo neoliberal ha sido y es impulsado, pese a su fracaso, por los sectores oligopólicos nacionales e internacionales y sus expresiones políticas y financieras.
3. Estos razonamientos nos llevan a una conclusión que parece un lugar común pero no lo es. Con el Gobierno de Funes la izquierda, en todos sus matices, debe desarrollar una crítica propositiva, constructiva, lo que quiere decir, que partiendo de los intereses humanamente justos de la mayoría de la población y las posibilidades reales de avanzar en su consecución, se desarrolle como método básico la PERSUACION, la DEMOSTRACION de las causas y efectos de los problemas y la PROPOSICION REALISTA de formas de solución.
4. El uso de la PRESION social debe dirigirse contra las causas de los problemas económicos y sociales, contra los intereses oligopólicos neoliberales que son el obstáculo principal, para un ejercicio más amplio y profundo del papel del Estado en la administración pública relacionada con programas sociales. Las posiciones oligopólicas neoliberales dificultan que los funcionarios del Gobierno de Funes y los funcionarios del FMLN desarrollen su capacidad de interlocución y gestión de cambio hacia el progreso económico y social democrático.
5. De manera que es determinante caracterizar el momento histórico, su secuencia, el período histórico por el cual se atraviesa para a su vez, examinar las funciones manifiestas y latentes del movimiento social en el período.
El pueblo, clasificado conforme intereses económicos y sociales, esta constituido por todos los sectores no oligopólicos, trabajadores y empresarios, que en el proceso electoral reciente el FMLN como partido político ha representado y conducido hacia el logro de un gobierno que posiblita una mayor democracia económica y social en el corto y mediano plazo y, conforme al programa máximos del FMLN, se abre inicialmente la perspectiva de construcción del socialismo en el largo plazo, dicho sea esto en términos históricos.
6. Al respecto es crucial comprender que en el momento histórico actual no se trata de cambio del SISTEMA capitalista por un SISTEMA socialista.
Una consideración al respecto podría ser que ni el sistema capitalista ha madurado suficientemente para ser erradicado plenamente ni el sistema socialista ha madurado suficientemente para ser instaurado plenamente.
El tratamiento de esta temática, de la construcción del socialismo deñ siglo XXI, con las diferencias geográficas e históricas del caso, a nivel mundial como nacional, es crecientemente, objeto de otra discusión profunda y abierta en términos de ciencia social.
7. Todo sistema económico y social tiene modos de funcionamiento, que nosotros llamamos “modelos” de funcionamiento (diferenciamos sistema y modelo económico, por primera vez, en un análisis del contexto de los Acuerdos de Esquipulas II en 1987, firmado por los Presidentes centroamericanos de ésa época).
Teórica y prácticamente, el modelo es una concreción del funcionamiento del sistema, pero no es el sistema; el modelo es auténtico, tiene independencia como hecho social; durante un período histórico el modelo posibilita el desarrollo del sistema, pero en otro período lo retrasa; el cambio del modelo es necesario para el desarrollo del sistema, pero también puede abrir el camino histórico de su sustitución; el modelo es un hecho de física social, nace, crece, se reproduce y muere o se agota en la provisión y canalización de energías económicas y sociales para el desarrollo del sistema.
8. El modelo neoliberal tiene tres componentes de política económica en que concreta la defensa histórica de los intereses oligopólicos del capitalismo nacional e internacional:
8.1. La liberación de precios. No control de los precios para empresas oligopólicas.
8.2. La privatización oligopólica. Traspaso de recursos y propiedades del Estado a la empresa privada y no control del accionar de la empresa privada, especialmente la oligopólica.
8.3. Reducción del papel del Estado. Recorte de subsidios y programas sociales.
La crisis económica mundial es producto del funcionamiento del sistema capitalista, y no del funcionamiento del modelo neoliberal.
La implementación del modelo neoliberal no ha creado pero ha agravado, la crisis capitalista.
En el contexto se han puesto de relieve las limitaciones y la caducidad del modelo neoliberal como modo de funcionamiento del capitalismo y en el mundo y especialmente en los Estados Unidos de América se ha recurrido una vez más (la primera vez fue en el contexto de la crisis capitalista mundial de 1930) a los fondos del Estado, que son los fondos de los contribuyentes, de la población, para “salvar” de la quiebra a empresas financieras, especialmente.
Las empresas financieras, podría decirse, que literalmente enloquecieron con el libertinaje del modelo neoliberal, haciendo una especulación financiera sin precedentes en la historia de la humanidad.
La exacción de recursos del Estado, la privatización insana, la extensión del desempleo, la inflación real, el incremento arbitrario de precios por parte de empresas oligopólicas, la impotencia en la protección de los derechos de los consumidores, el fraude mercantil, la exponencialmente creciente corrupción pública y privada, el incremento de la delincuencia de cuello blanco y del enriquecimiento criminal y la pobreza han acentuado la necesidad del resurgimiento de la importancia del papel del Estado y de una sana administración pública (eficiente, transparente y honradamente consecuente) dada la potencialidad de los conflictos sociales desatados como resultante de la crisis económica agravada con el neoliberalismo.
Nuestro país no es una excepción. Se ha mantenido y profundizado un modelo neoliberal durante más de dos décadas durante la administración del partido ARENA, pero que todavía subsiste a pesar de su fracaso y el descontento social ocasionado por el denominado "capitalismo salvaje" impulsado por el neoliberalismo, se manifestó en la votación que culminó con la elección de Mauricio Funes adscrito a la trayectoria histórica del FMLN.
9. De manera que el cambio del modelo es una necesidad histórica presente.
Al respecto pueden plantearse dos escenarios, en la actual coyuntura histórica y de acuerdo a la correlación de fuerzas existente:
9.1. Se realizan cambios débiles y orientados al mantenimiento del modelo neoliberal pero reacondicionado o reformado, impulsando algunos programas sociales por parte del Estado. Esto implica el mantenimiento del modelo neoliberal y el sistema capitalista en el largo plazo.
9.2. Se realizan cambios graduales pero firmes y orientados al cambio del modelo neoliberal por un modelo de economía con una mayor participación del Estado.
Esto implica la posibilidad del inicio del cambio del modelo neoliberal en dos vertientes en el largo plazo: el mantenimiento del sitema capitalista a mayores niveles de expansión o el inicio de la sustitución del sistema capitalista por un sistema socialista.
Partimos de la premisa de que el cambio económico y social hacia una mayor participación del Estado, superficial o profunda, es una necesidad histórica. No puede no hacerse cambios.
En la secuencia de los escenarios hay un punto común: el gobierno de Mauricio Funes ha iniciado cambios, que podrían reputarse como históricamente tenues, pero que tienen un gran significado en el momento histórico, de cambios necesarios.
Esos cambios iniciales, que han capturado la aprobación inicial de la población, tienen, probablemente, la perspectiva siguiente en otros dos escenarios:
9.1. El gobierno de Mauricio Funes no logra que los cambios trasciendan el modelo neoliberal y la correlación de fuerzas económica y social, nacional e internacional, conducen los cambios para reacondicionar y modernizar el modelo neoliberal.
En este escenario las contradicciones y fricciones de los intereses de la población con los intereses oligopólicos, nacionales e internacionales se agravarían, habría confrontación e inestabilidad social, de dimensiones nacionales, nos parece. La situación económica y social de la mayoría de la población tenderá a agravarse, y a complicarse la conducción del movimiento social porque la población reaccionaría con lucha social, que se convertiría en lucha política con diversas expresiones de violencia social, como respuesta a la profundización de las debilidades del modelo neoliberal, conforme a un listado de debilidades que enunciamos anteriormente, en el numeral 8.
Al aumentar la conflictividad surgirían nuevos liderazgos y organizaciones y se ocasionarían distanciamientos entre el FMLN y el gobierno.
Y la misma derecha insistiría en la incapacidad del gobierno para resolver los problemas que se comprometió a solucionar e intentaría generar divisiones entre el gobierno y el FMLN, en la dirección de habilitar la posibilidad de retomar directamente el poder gubernamental en el próximo período electoral, si no antes.
En este escenario el agravamiento de la conflictividad social sería mayor pues el FMLN tendría que retomar su capacidad de conducción social después de un intento cuestionado de cambio desde un gobierno adscrito a su trayectoria y el espacio político social, con sus flujos y reflujos, podría ser llenado por otro tipo de organizaciones, sin la trayectoria histórica, ideologica, teórica y organizativa del FMLN. En este escenario de continuidad del neoliberalismo, nos parece que se debilitaría un instrumento central, el FMLN, de participación política del pueblo salvadoreño. Es un escenario difícil para toda la sociedad, pues los espacios políticos podrína ser llenados por todo tipo de organizaciones, incluyendo la potencialización de la influencia del crimen organizado y se abriría con ello, la posibilidad de instauración de una dictadura militar.
En la secuencia del escenario 9.2. El gobierno de Mauricio Funes ya ha iniciado cambios que son sensibles en la medida en que nuestra población ha sido históricamente excluída de la provisión de derechos, condiciones, bienes y conportamientos de respeto elementales en el manejo de los fondos públicos, como son la fiscalización efectiva de la administración pública, la educación, la salud, la vivienda.
Los programas de auditorías externas en los Ministerios, la dotación de paquetes escolares, la eliminación de las cuotas voluntarias en el sistema de salud, la escrituración de propiedades, el lanzamiento del programa de vivienda, el enunciado de la administración de Funes de que se hará un manejo de los fondos públicos con austeridad y eficiencia tiene un impacto visible, inmediato.
En la secuencia de estos primeros cambios significativos, el gobierno de Mauricio Funes probablemente impulsará cambios graduales cuidadosamente calculados conforme a la construcción de correlaciones de fuerzas económicas y sociales que lo llevarán a cuestionar las bases NO DEL SISTEMA CAPITALISTA, SINO DEL MODELO NEOLIBERAL
Un punto inicial de este cuestionamiento de las bases del modelo neoliberal probablemente sean las adecuaciones al sistema financiero y al pacto fiscal para evitar la evasión y la conformación y planteamientos del Consejo de Desarrollo Económico y Social.
El cuestionamiento y el inicio del proceso de sustitución del modelo neoliberal son una necesidad histórica y social.
10. La continuidad y profundización del cuestionamiento del modelo neoliberal depende de la movilización social que previsiblemente se realizará de manera espontánea o inducida.
La sociedad civil y la sociedad política evaluaran estrategias y tácticas del gobierno de Mauricio Funes y del FMLN y cada fuerza formulará los lineamientos para el próximo período electoral.
11. En el enjambre de contradicciones, evolucionando a paso lento, se puede percibir que este período corresponde al tránsito del modelo neoliberal al modelo de economía estatal de mercado, generando posibilidades de largo plazo, que se dirimirán en el proceso, tanto para el mantenimiento del sistema como para el cambio del sistema.
Inevitablemente se intensificará la organización social de las fuerzas políticas y sociales de la población.
De manera que estamos en un período de cambio del modelo neoliberal al modelo de economía estatal de mercado.
Como una fuerza de física social, gradualmente pero persistentemente es previsible que la población reivindique sus derechos del trabajo: mejoras en el salario mínimo social, reducción de precios oligopólicos e impuestos a bienes básicos, exija la defensa estatal contra abusos de empresas oligopólicas, programas sociales de educación, salud, vivienda y fiscalice la capacidad, la eficiencia, la transparencia, en el manejo de los fondos públicos en la dirección necesaria de impulso gradual de una sociedad organizada en el respeto económico y social al trabajo desplegado.
En otras palabras es previsible una situación de fricciones sociales en que la población se manifieste políticamete y económicamente, por el control de precios oligopólicos, la regulación de empresas privadas oligopólicas y la adecuación eficiente y sin corrupción, de las empresas y funciones estatales estratégicas (electricidad, telefonía, pensiones, banca del Estado, por ejemplo) por tratarse de bienes y servicios públicos de vital necesidad.
Y también es previsible que la población canalice la presión política hacia los hechos sociales, no hacia el gobierno, en la perspectiva de que el gobierno también procurará impulsar la concreción de los legítimos intereses de los sectores sociales excluídos. En este escenario el gobierno de Mauricio Funes y el FMLN, como partido político, se fortalecen; es a nuestro juicio, el escenario más favorable para la izquierda y para toda la sociedad porque, tanto el Gobierno como el Partido, fortalecen su apoyo social, su capacidad de administración y de gestión política de la crisis y el país crece económicamente, desplazando contradicciones sociales.
12. El problema del cambio del modelo neoliberal al modelo de economía estatal de mercado, es en gran medida un problema de conciencia y de capacidad de administrar y gestionar el cambio.
Al respecto, nos parece prudente hacer las siguientes consideraciones:
12.1. Considerar que una parte central del problema del cambio social es un problema de conocimiento, conciencia social, idoneidad y capacidad para administrar y gestionar el cambio.
12.2. Considerar al gobierno de Mauricio Funes como lo que es, un aliado del FMLN en el cambio del modelo neoliberal. No solamente expresó formalmente su voluntad de cambio del modelo durante la campaña electoral, suscrito en el documento del Programa de Gobierno, que aunque presente aspectos de desarticulación lógica y falta de priorización enuncia medidas sustanciales que están relacionadas con el cambio del modelo neoliberal, en los términos que expusimos en el numeral 8.
12.3. Considerar que el gobierno de Mauricio Funes inicia procesos de cambio en el manejo del presupuesto nacional que favorecen los objetivos de la población, y que la situación presupuetaria del gobierno ha sido grave, por el deterioro de las arcas del Estado en anteriores períodos.
Considerar el apoyo positivo de las medidas relacionadas con la dotación de paquetes escolares, reducción de cuotas en los hospitales, programa de vivienda, adjudicación de tierras, probable promoción de la banca del Estado.
12.4. Considerar que si no se avanza en el cuestionamiento del modelo neoliberal, los problemas engendrados por éste aparecerán potencializados: predominio de precios altos oligopólicos que consumirán los recursos derivados de las políticas de redistribución del ingreso del gobierno; impunidad de acción lesiva de los intereses nacionales por parte de empresas oligopólicas, cobros arbitrarios y evasión de responsabilidades impositivas; limitación de los recursos y perspectivas de empresarialidad democrática y de apoyo al desarrollo emprendedor alternativo por parte del Estado, y forzamiento a un creciente endeudamiento dependiente y supeditado que resultará en mayores cargas impositivas para la población.
Considerar que en la perspectiva del cambio del modelo neoliberal la demanda de la población aumentará y dinamizará la economía y la empresa y a la par del desarrollo de potencialidades de organización y movilidad social, la población desarrollará capacidades alternativas de emprendimiento, de generación de bienes materiales, de trabajo productivo, con función social.
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1 comentario:
me dirigo exactamente a la violacion de derechos a los trabajadores de ANDA, a la llegada de su nuevo presidente el sr, gomez, lamentando que sea una persona tan incapaz y bulgar al tratar a los empleados de ANDA de forma irrespetuosa, pateando sus derechos y moral de una manera inaceptable y ofensiva.
Cabe recordar que el es un exempleado de ANDA, que se expulso de la institucion en los años 90,y que ahora es presidente de dicha institucion.
Soy un usuario del servicio de ANDA, y personalmente me he dado cuenta lo que estan sufriendo personal de agencias o areas administrativas.
Esperamos que nuestro Presidente Mauricio Funes, se entere de este gran error que hay en ANDA, y tome cartas en el asunto
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